La decisión de los Estados Unidos de postularse como candidato para el Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas es un paso hacia un liderazgo más comprometido y eficaz en materia de derechos humanos a nivel global, dijo hoy Human Rights Watch. Mediante la búsqueda de un puesto en el Consejo de las Naciones Unidas, compuesto por 47 miembros, el gobierno de Estados Unidos puede hacer escuchar su voz en debates críticos sobre la protección y promoción de los derechos humanos en todo el mundo.
"La participación activa de Estados Unidos traerá nueva energía y atención a las deliberaciones y acciones del Consejo de Derechos Humanos, ayudando a que éste se convierta en una fuerza más creíble para la promoción de los derechos humanos", dijo Kenneth Roth, director ejecutivo de Human Rights Watch. "Esperamos que esto marque el inicio de una nueva era de compromiso y liderazgo de Estados Unidos en nombre de los derechos humanos".
El Consejo de Derechos Humanos, establecido en 2006 y con sede en Ginebra, es el principal organismo multilateral dedicado a la promoción y aplicación de los derechos humanos. El gobierno de Bush rechazó postularse para buscar un puesto en el consejo, y en 2008 suspendió su participación como miembro observador en las deliberaciones del mismo.
Para los Estados miembros de la ONU las próximas elecciones de mayo de 2009 para seleccionar los participantes en el Consejo de Derechos Humanos representan una oportunidad importante para elegir entre los miembros aspirantes a aquellos con los criterios y la habilidad para avanzar la labor del Consejo. Debido a la importancia central de las competitivas elecciones para garantizar la más fuerte membrecía posible, Human Rights Watch lamenta la decisión del gobierno de Nueva Zelanda de retirar su candidatura a un puesto en el Consejo.
El Consejo de Derechos Humanos ha sido criticado por no tratar con eficacia la amplia gama de graves problemas de derechos humanos alrededor del mundo y ha sido acusado de mantener un enfoque unilateral en el conflicto palestino-israelí.
Sin embargo, el Consejo tiene una serie de cuestiones urgentes en su agenda, incluyendo las crisis en Sri Lanka, Somalia y otros lugares, así como una amplia gama de cuestiones temáticas importantes, como la tortura, derechos de la mujer, y la necesidad de garantizar que los violadores de derechos humanos sean llevados ante la justicia. El Consejo también lleva a cabo revisiones rutinarias y periódicas de las condiciones de derechos humanos en cada nación miembro de la ONU.
Mediante la postulación por un asiento en el Consejo, y ejerciendo un liderazgo basado en principios como miembro del Consejo, Estados Unidos puede ahora ayudar a esta importante institución a ejercer su máximo potencial, dijo Human Rights Watch.
