(Nueva York) – Tirana Hassan, abogada e investigadora con vasta trayectoria en reportar violaciones de derechos humanos durante crisis y conflictos a nivel global, ha sido nombrada nueva directora ejecutiva de Human Rights Watch, anunció hoy la organización. Hassan fue responsable de varios programas de Human Rights Watch y se ha desempeñado como directora ejecutiva interina desde septiembre de 2022, tras la salida de Kenneth Roth, quien lideró la organización durante varios años.
“Como nueva directora ejecutiva de Human Rights Watch, Tirana Hassan trae consigo credenciales impecables en el campo de los derechos humanos, así como una visión ambiciosa que plantea soluciones a desafíos que atraviesa el mundo”, expresó Zeid Ra’ad Al Hussein, director ejecutivo y presidente del International Peace Institute y ex Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos. “Tirana es una activista con gran experiencia, será una líder excepcional y, sin duda, una fuerza para tener en cuenta”.
Hassan, quien tiene décadas de trayectoria en el ámbito humanitario y de los derechos humanos, empezó su carrera como trabajadora social. Se dedicó años a trabajar con mujeres, niños y niñas en situaciones de conflicto y de crisis. Se incorporó a Human Rights Watch en 2010 para dar cobertura a emergencias en África, Asia y Medio Oriente. Posteriormente asumió como directora de respuesta a crisis en Amnistía Internacional; más tarde, en 2020, regresó a Human Rights Watch para ejercer como responsable de programas frente a los departamentos de investigación, incidencia, asuntos legales y comunicaciones.
“Tirana presenta una combinación de amplia experiencia en investigación, creatividad estratégica y profundo compromiso con los principios que Human Rights Watch precisa para hacer frente a los desafíos complejos de derechos humanos que experimenta el mundo”, apuntó Kenneth Roth, ex director ejecutivo de Human Rights Watch, quien dejó el cargo en agosto de 2022. “Es una gran noticia saber que ella estará al frente de Human Rights Watch en el futuro”.
Cuando dirigió el equipo de crisis en Amnistía Internacional, Hassan supervisó el desarrollo de usos innovadores de tecnología para promover investigaciones sobre derechos humanos en Myanmar, Siria y otras áreas. Posee experiencia comprobada en el desarrollo de programas ambiciosos que abordan cuestiones críticas de derechos humanos. Va a liderar el trabajo de Human Rights Watch con activistas, sobrevivientes y la sociedad civil, para así contrarrestar las amenazas, cada vez mayores, a los derechos humanos en el mundo.
“Tirana aporta una visión potente de innovación, que combina métodos de documentación probados y certeros con tecnologías novedosas y emergentes”, explicó Brad Samuels, director de SITU Research, una organización que realiza investigaciones visuales y ha trabajado con Human Rights Watch en varios proyectos. “Tirana va a transitar un contexto tecnológico donde abundan oportunidades y peligros en igual medida. Sin embargo, su enfoque crítico, riguroso y de colaboración le permitirá liberar un potencial de investigación prometedor que no ha sido explotado. Su nombramiento es una noticia que incomodará a déspotas, regímenes autocráticos y, sobre todo, a quienes intentan eludir la rendición de cuentas”.
Una de las prioridades de Hassan será llamar la atención a los gobiernos por la aplicación selectiva de sus obligaciones en materia de derechos humanos. La respuesta rápida y valiente a la crisis en Ucrania —incluida una comisión de investigación en el Consejo de Derechos Humanos de la ONU y múltiples condenas por parte de la Asamblea General de la ONU— ha demostrado lo que puede ser posible cuando los gobiernos trabajan juntos. Asimismo, la orden de detención de la Corte Penal Internacional contra el presidente ruso, Vladimir Putin, muestra que nadie escapa de la justicia. Sin embargo, los mismos gobiernos a menudo han tenido, en el mejor de los casos, una respuesta tibia y, en el peor, han mirado hacia otro lado ante el sufrimiento de las víctimas. Hassan se enfocará en usar todos los mecanismos de presión posibles para instar a los gobiernos a materializar sus obligaciones ante las víctimas, dondequiera que estén, incluidos Afganistán, Israel y Palestina, Etiopía e Irán.
Nacida en Singapur, Hassan es hija de padre de nacionalidad paquistaní cuya familia se fue de la India durante la partición, y de madre esrilanquesa y china nacida en Malasia. Su familia se reubicó en Australia en la década de 1970, pues las investigaciones académicas impulsadas por su padre sobre las políticas de vivienda en Singapur despertaron la ira de un gobierno que reprimía el disenso. Ha señalado que las vivencias familiares de racismo, prejuicio y represión contribuyeron a definir su perspectiva del mundo y su decisión de trabajar por las personas desposeídas.
“Tirana cuenta con una habilidad singular de actuar como una líder fuerte y empática para denunciar injusticias sin titubeos”, expresó Sherine Tadros, excorresponsal de Sky News y actual titular de la oficina de Amnistía Internacional ante la ONU y vicedirectora de incidencia, quien trabajó en colaboración estrecha con Hassan a lo largo de los años. “El personal de Human Rights Watch es muy afortunado de contar con ella, y la comunidad de derechos humanos se fortalece con Tirana al mando”.
Tras recibir su licenciatura en trabajo social por la Universidad del Sur de Australia, Hassan ejerció como trabajadora social en Los Ángeles, Londres y Adelaida, orientando a jóvenes en situación de calle. Posteriormente, obtuvo un título en derecho por la Universidad de Adelaida; y, en su último año en la facultad, fundó Woomera Lawyers Group, una organización de incidencia sobre refugiados. Prestó servicios legales a personas que se encontraban en un polémico centro de detención, ubicado en el desierto australiano, y representó a refugiados y solicitantes de asilo procedentes de Afganistán, Irak e Irán que estuvieron allí detenidos. Más tarde, pasó a trabajar en el sector humanitario. Hassan también tiene una maestría en derecho internacional de los derechos humanos otorgado por la Universidad de Oxford.
Se desempeñó como especialista en protección a niños, niñas y sobrevivientes de violencia sexual y de género en zonas de conflicto, así como en la respuesta a desastres naturales en Asia y África con Médicos Sin Fronteras, el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia y Save the Children.
“Es un gran honor y significa mucho para mí liderar a esta organización excepcional en un momento en que la defensa de los derechos humanos se siente más urgente que nunca”, afirmó Hassan. “Espero seguir construyendo sobre las bases sólidas que ha desarrollado Human Rights Watch, y ayudando a los defensores de derechos humanos con los que trabajamos, así como a las comunidades a las que servimos. De este modo, presionaremos a los gobernantes para que hagan realidad un futuro en que se respeten los derechos de todos.”.
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