(París) – Durante su próxima reunión, el Consejo Ejecutivo de la UNESCO debería abolir un premio financiado por el presidente Teodoro Obiang Nguema Mbasogo de Guinea Ecuatorial y que lleva su nombre, señalaron hoy siete organizaciones de la sociedad civil. Está previsto que el Consejo adopte una decisión definitiva sobre el premio durante la sesión que tendrá lugar en París del 27 de febrero al 10 de marzo de 2012.
La UNESCO ha pospuesto en varias oportunidades cualquier determinación sobre el premio ante las voces que se alzaron en todo el mundo en contra del presidente Obiang, cuyo mandato ha estado asociado con altos niveles de corrupción, represión y pobreza en Guinea Ecuatorial. En septiembre de 2011, la directora general de la UNESCO, Irina Bokova, instó al presidente Obiang a cancelar el premio como una “prueba de generosidad” con la organización. En noviembre, el Gobierno de Guinea Ecuatorial anunció en cambio que el presidente Obiang estaba dispuesto a “renunciar” a que el premio de investigación en ciencias de la vida, creado en 2008, “lleve su nombre”. Las organizaciones de la sociedad civil indicaron que la UNESCO debería rechazar rotundamente esa propuesta.
“El premio UNESCO-Obiang está asociado de manera irreversible con la represión y el alto nivel de corrupción que caracterizan al gobierno del presidente Obiang”, afirmó el arzobispo Desmond Tutu, ganador del Premio Nobel quien ha repudiado el premio en numerosas oportunidades. “Dar un nuevo nombre al premio no ofrece ninguna respuesta a estos señalamientos ni disipa las dudas sobre el origen de los fondos con los cuales se financia”.
Diversas organizaciones de la sociedad civil y personas destacadas que se han opuesto al premio UNESCO-Obiang han hecho hincapié en que la campaña global para conseguir su cancelación no tiene que ver solamente con el nombre. Varias personas que fueron galardonadas con el Premio Mundial de Libertad de Prensa Guillermo Cano, por ejemplo, se manifestaron en contra del premio UNESCO-Obiang y señalaron que el régimen autoritario del presidente Obiang no es compatible con el trabajo llevado a cabo por la UNESCO a favor de la libertad de expresión. El Gobierno de Guinea Ecuatorial no permite que periodistas de medios estatales transmitan información crítica sobre el presidente Obiang y, como resultado, numerosos ciudadanos no tienen acceso a noticias sobre la controversia en torno a este premio.
Las investigaciones sobre corrupción que se encuentran actualmente en curso en Francia, España y Estados Unidos contra el presidente Obiang, algunos de sus familiares o sus socios más cercanos aumenta las preocupaciones de que la corrupción se encuentra arraigada en los más altos niveles del Gobierno de Guinea Ecuatorial. En septiembre, las autoridades francesas decomisaron 11 lujosos automóviles valuados en más de US$ 5 millones que pertenecen al hijo mayor del presidente Obiang, Teodoro Nguema Obiang (“Teodorín”), y que se encontraban en una mansión en un exclusivo distrito de París donde este último reside cuando se encuentra en Francia. La confiscación se produjo a poca distancia de la sede de la UNESCO, donde algunos días después varios delegados reiteraron su decisión anterior de suspender este controvertido premio.
El 14 de febrero, las autoridades francesas dieron comienzo a una segunda requisa en la residencia de Obiang en París en el marco de una investigación por presuntos actos de malversación. Durante la requisa, que concluyó el 23 de febrero, la policía habría incautado al menos dos camiones con valiosas antigüedades y obras de arte compradas por Teodorín. Según versiones de la prensa, se cree que estos artículos tendrían un valor no menor a 40 millones de euros.
En octubre, el Departamento de Justicia de Estados Unidos presentó un recurso para decomisar bienes por un valor de más de US$ 70 millones que pertenecen a Teodorín, y sostuvo que este compró los artículos con fondos obtenidos a través de “extorsión y/o apropiacion indebida, robo o malversación de fondos públicos”.
Los abogados de Teodorín en Francia y Estados Unidos han impugnado las denuncias contra su cliente.
El 13 de octubre, pocos días después de que la UNESCO acordara extender la suspensión del premio, el presidente Obiang nombró a Teodorín como delegado permanente adjunto del país ante la UNESCO. Según la opinión general, la decisión no es más que un intento por conseguir que reciba inmunidad diplomática en Francia.
“El presidente Obiang pretende utilizar a la UNESCO en forma indebida para mejorar su imagen y proteger a su hijo de problemas legales”, afirmó Tutu Alicante, director de la organización no gubernamental EG Justice y exiliado de Guinea Ecuatorial. “La UNESCO debería revocar el premio Obiang y enviar así un mensaje rotundo de que su nombre no se vende al mejor postor”.
Cientos de personas y decenas de organizaciones, muchas de ellas de países africanos, se opusieron a este controvertido premio y exigieron que el monto de US$3 millones se utilice en cambio para mitigar los altos niveles de pobreza que existen en este país petrolero.
Según el Informe sobre Desarrollo Humano 2011 de las Naciones Unidas, el producto bruto interno (PBI) per cápita de Guinea Ecuatorial, de US$ 31,779, es equiparable al de Japón e Italia, y se posiciona por debajo del de Francia con una diferencia de tan sólo US$ 2,000. A pesar de esto, las precarias condiciones de vida ubican a Guinea Ecuatorial en el puesto 136 entre los 187 países en el Índice de Desarrollo Humano, y lo convierten en el país con la brecha más profunda entre el nivel de riqueza y su desempeño en materia de desarrollo humano.
Las siete organizaciones que suscriben la declaración difundida el día de hoy para instar una vez más a la UNESCO a poner fin al premio Obiang son:
Asociación Pro Derechos Humanos de España
Association Sherpa
Comité para la Protección de los Periodistas
EG Justice
Global Witness
Human Rights Watch
Open Society Justice Initiative