Hoy tenemos una excelente noticia: la condena de un ex alto funcionario por crímenes atroces.
Ayer, un tribunal suizo dictó sentencia condenatoria contra el ex ministro del Interior de Gambia Ousman Sonko por su participación en crímenes contra la humanidad relacionados con torturas, detenciones ilegales y homicidios ilegítimos entre 2000 y 2016. El tribunal lo condenó a 20 años de prisión.
Estos crímenes ocurrieron bajo el brutal gobierno del entonces presidente Yahya Jammeh. Durante 22 años, el gobierno de Jammeh llevó a cabo una represión sistemática, dirigida contra periodistas, defensores de los derechos humanos, líderes estudiantiles, líderes religiosos y personas LGBT, entre otros.
Muchos fueron torturados, sometidos a violencia sexual, desaparecidos y/o asesinados.
Es posible que se pregunte: ¿Por qué un tribunal suizo juzga a un ex funcionario gambiano por crímenes cometidos en Gambia?
La respuesta es un principio jurídico conocido como "jurisdicción universal".
Ahora bien, los tribunales nacionales de un país suelen poder ocuparse de un delito si existe alguna conexión entre ese país y el delito. Eso parece bastante obvio.
Sin embargo, los tribunales nacionales también pueden actuar incluso si no existe tal conexión para un número limitado de crímenes internacionales. Entre ellos se incluyen los crímenes de guerra, los crímenes contra la humanidad, la tortura, el genocidio, etc.
Los tribunales nacionales pueden investigar y enjuiciar estos delitos aunque hayan sido cometidos en el extranjero, por extranjeros contra extranjeros. El razonamiento es que estos delitos se consideran tan graves que garantizar que no queden impunes concierne a la humanidad en su conjunto.
En realidad, este principio de jurisdicción universal no es nuevo. Se codificó en los Convenios de Ginebra de 1949 sobre las leyes de la guerra. La jurisdicción universal permitió, por ejemplo, que el Estado de Israel procesara en 1961 al alto funcionario nazi Aldolf Eichmann por su papel en el Holocausto.
En los últimos años, los tribunales nacionales han empezado a utilizar cada vez más la jurisdicción universal. Resulta especialmente útil para juzgar delitos graves en lugares donde los esfuerzos de la justicia local se ven obstaculizados o retrasados.
Desde la caída de Jammeh en 2016, el gobierno de Gambia solo ha procesado a dos personas por delitos de la época de Jammeh. En la actualidad, en Gambia se han revitalizado los esfuerzos de la justicia, pero aún así, muchas víctimas llevan mucho tiempo esperando justicia.
El reconocimiento de la jurisdicción universal en la legislación suiza ofreció una vía para avanzar. Sonko fue detenido en Suiza en 2017, después de que el grupo no gubernamental suizo TRIAL International presentara una denuncia penal contra él.
La noticia de ayer fue enorme. Se trataba de un alto dirigente -un ex ministro del Interior, nada menos- de un régimen atroz. Su condena es una victoria monumental para las víctimas de Gambia.
Y es una doble victoria, porque refuerza un principio jurídico que puede conducir a la justicia para muchas otras víctimas de crímenes atroces en todo el mundo.