(Nueva York) - Los 58 países en el Consejo Ejecutivo de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) deberían suspender los planes para la concesión de un premio de investigación en ciencias de la vida financiado por el dictador de Guinea Ecuatorial y nombrado en su honor, dijo hoy Human Rights Watch.
Fuentes en la UNESCO dijeron que la reunión de la organización programada para el 15 de junio en París es la última oportunidad de la que dispondrá el Consejo para expresar su rechazo al Premio Internacional UNESCO-Obiang Nguema Mbasogo de investigación en ciencias de la vida antes de la ceremonia de entrega, provisionalmente programada para fines de junio.
"El premio UNESCO-Obiang es una mancha en la reputación de todos los miembros de la UNESCO", dijo Jon Elliott, director de defensa y promoción de la División de África de Human Rights Watch. "A menos que los gobiernos hablen alto y claro para detener esta inminente farsa, todos compartirán la responsabilidad".
Una campaña global que agrupa a decenas de organizaciones de la sociedad civil, incluyendo grupos de África, Asia, Europa del Este, América Latina y Medio Oriente, ha advertido a los líderes de la UNESCO que la controversia que rodea al premio puede causarle daños irreparables a la reputación de la organización. Además de los grupos de defensa de los derechos humanos, entre los detractores del premio también figuran organizaciones de libertad de expresión, académicos, defensores de la salud pública y científicos de todo el mundo.
Obiang hizo referencia directa a la controversia en un video publicado en YouTube. En él, dice que dedicó fondos a la creación del premio de la UNESCO para fomentar la investigación científica que ayude a preservar la vida humana".
"Se supone que el premio UNESCO-Obiang está dedicado a los avances científicos con el propósito de mejorar la calidad de la vida de todos. Sin embargo, la verdadera intención del presidente Obiang es enmascarar su mandato corrupto y abusivo. Más le valdría mejorar primero las miserables condiciones en las que vive la mayoría de ecuatoguineanos", señaló Elliott.
Aunque la riqueza petrolera de Guinea Ecuatorial y su pequeña población permitirían que el país tenga un PIB per cápita aproximadamente equivalente al de España o Corea del Sur, los indicadores socioeconómicos revelan que la población del país sufre condiciones de vida peores que las existentes en muchas regiones azotadas por la guerra. Por ejemplo, investigaciones recientes muestran que las estadísticas de mortalidad infantil en Guinea Ecuatorial son las peores en todo el mundo.