España: Inseguridad alimentaria y pobreza empeoran con la pandemia
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Jorge Afonso
Nunca pensé pasarlo, de estar pidiendo comida y ayuda económica a estas alturas de mi vida.
Tamara
Pues como madre de familia me siento con una ansiedad por las nubes, con una impotencia terrible.
Pedro Luis Álvarez
Mis sueños, mis aspiraciones ahora mismo son inmediatas… sobrevivir.
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Las consecuencias de la pandemia del Covid-19 en
España empujaron a cientos de miles de personas
a la pobreza, comprometiendo la protección de
sus derechos fundamentales.
El gobierno español no ha respondido
adecuadamente a las necesidades de alimentación
y de prestaciones sociales de las personas, haciendo que
tengan que recurrir a los bancos de alimentos.
Raquel Coronel
He venido a recoger acá alimentos porque necesito. Y más que todo porque me he quedado desempleada también y no tengo otra opción.
Jorge Afonso
Yo como técnico informático trabajaba y tenía mi propio negocio incluso, pero debido a la pandemia me afectó muchísimo y quedé en esta situación económica. Algo que nunca me había pasado en la vida.
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España necesita un sistema de seguridad social
que garantice el derecho a la alimentación
y un nivel de vida adecuado.
Paola Castillo Erago
coordinadora de reparto de alimentos
Parroquia de San Ramón Nonato.
Durante la pandemia el número de gente, de beneficiarios aumentó increíblemente. La situación de pobreza ahora mismo es muy seria porque nos hemos dado cuenta que gente aun con trabajo recurre a Cáritas, en este caso, para pedir ayuda porque el sueldo que recibe pues no les alcanza para sostener a su familia.
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En abril de 2020 el gobierno español amplió el
sistema de los ERTE e introdujo el Ingreso Mínimo
Vital (IMV) para ayudar a los ciudadanos
y residentes durante la pandemia.
Sin embargo, mucha gente necesitada nunca obtuvo la ayuda.
75% de las aplicaciones presentadas al IMV hasta marzo de 2021 fueron rechazadas.
Pedro Luis Álvarez
Cuando trabajé en una fábrica, recibía algo así como 1050 [euros] al mes. Solo de renta pago 730, cuando restas la renta, cuando restas el abono transporte, cuando restas la energía, cuando restas el agua, cuando restas el cole de las niñas, no queda nada. Así de simple. Hemos intentado acceder a diferentes recursos que establece el gobierno, como por ejemplo el Ingreso Mínimo Vital. Y siempre nos encontramos en un limbo. ¿En qué tipo de limbo? Pues que siempre hay un requisito que nos excluye.
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Pedro, quien viene de Cuba,
es ciudadano español y es una
de los seis millones de personas que
viven en la pobreza en España.
Pedro Luis Álvarez
La mayor dificultad que tenemos es el tema energético. En los inviernos pasamos mucho frío, mucho frío, y sencillamente no nos podemos pagar la calefacción. Todo constituye una dificultad cuando no se tiene lo suficiente. Llegar aquí a España, una tierra que desde lejos uno ama, y ver que la situación es tan difícil. Nosotros nos vemos sin futuro, nuestra perspectiva si no tenemos un golpe de suerte es terrible.
Tamara
En este momento los ingresos que tengo yo ahora mismo en mi casa son de cero. Los gastos pueden ser de 150, 200. Pues el impacto económico se ha notado mucho en mi familia. Porque yo trabajaba limpiando casas y yo me quedé sin las casas porque eran de gente mayor. Estoy a la espera de que haya citas en el paro para que me den una prestación… es que no hay citas en el paro.
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Para muchos, durante la crisis,
la ayuda vino de miembros
de su comunidad.
Jessica Ferrer
Despensa Solidaria San Diego
(El) estándar que más ves es las personas que limpian y los que cuidan ancianos, y luego les sigue las personas de restauración, los mesoneros y los cocineros. Pienso que el gobierno debería tener estrategias más fuertes para ayudas a las familias. Lo poco que están haciendo no se nota. Porque si no, no estuviéramos nosotros acá para este tipo de casos.
Usman Camara
Cuando viene la pandemia había toda clase de gente. Españoles, migrantes… había aquí toda clase de gente [que] no tenía alimento básico para comer un plato diario. Ni poder comprar una barra de pan. Y por lo menos, gracias a la colaboración de bancos de alimentos, toda esa clase de gente se han podido mantener en su comida diariamente, sin dejar a nadie atrás.
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Usman donó cientos de kilos de fruta
y verdura a bancos de alimentos
comunitarios durante el pico de la crisis.
Usman Camara
Hombre, yo... eso es fundamental, alimento básico no le debe faltar a nadie. Y si lo dejamos pasar así yo creo que ya perdimos el juicio totalmente. Para mí es más importante no ver a nadie que esté andando con hambre, porque debemos colaborar, y debemos apoyar y debemos ayudar.
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Gobiernos como el de España deberían
aprender lecciones de la pandemia.
Deberían reformar el sistema de
seguridad social para que garantice los
derechos de seguridad social, alimentación
y un nivel de vida adecuado y digno.
Los derechos de las personas,
incluido el de alimentar a sus familias,
siempre debe ser protegido,
especialmente en momentos de crisis.
La inseguridad alimentaria y la pobreza, ambos problemas persistentes en España, se agudizaron por la pandemia de Covid-19 y su impacto económico. El gobierno español amplió los programas de apoyo al desempleo existentes e introdujo un programa pionero de asistencia social al principio de la pandemia. Sin embargo, los problemas de implementación y las debilidades y defectos existentes en el sistema de seguridad social hicieron que la respuesta estatal se quedara corta, dando como resultado que los derechos de las personas a la alimentación, a la seguridad social y a un nivel de vida adecuado no fueron satisfechos ni protegidos. Las “colas del hambre” en las iglesias, las asociaciones de vecinos y los centros comunitarios se convirtieron en una realidad habitual durante los dos primeros años de la pandemia. Las personas que trabajan en el sector de la hostelería y en la economía informal, las personas mayores que reciben pensiones, las familias con niños que viven con bajos ingresos y las personas con una situación de inmigración precaria o irregular se han visto especialmente afectadas. El informe “No podemos vivir así” se basa en entrevistas a personas en colas del hambre en Madrid y Barcelona, junto con entrevistas a proveedores de ayuda alimentaria y datos oficiales y de ONG, para documentar cómo las personas luchan por satisfacer sus necesidades básicas, como la comida, sin ayuda no gubernamental, y cómo las autoridades no han cumplido con su deber de proteger sus derechos.