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Indonesia Se deterioran derechos humanos en la provincia de Aceh
(Nueva York, 11 de noviembre de 2000) Human Rights Watch advirtió hoy que la deteriorante situación en Aceh se estaba rápidamente transformando en una prueba de autoridad al presidente Wahid y del control de las fuerzas armadas por parte de la población civil.
Mientras grupos de estudiantes y organizaciones no gubernamentales están organizando una importante protesta en la capital provincial de Banda Aceh este fin de semana en apoyo a un referéndum acerca del estado político de Aceh, la policía y unidades militares han estado haciendo redadas a oficinas de ONG, arrestando a aquellos relacionados en la preparación de la protesta, bloqueando el trafico, revisando vehículos que se dirigen hacia la capital, y disparando a participantes de la protesta que tratan de ir a Banda Aceh. Una protesta similar que sucedió el 8 de noviembre en la capital atrajo estimadamente a un millón de personas. "Las fuerzas armadas de Indonesia parecen estar actuando como en los peores momentos de la era de Soeharto," dijo Sidney Jones, la directora ejecutiva de la división de Asia de Human Rights Watch. "En una errónea idea de que el soporte al referéndum esta siendo dirigido por el GAM, las fuerzas armadas y la policía están apuntando sus ataques hacia la población civil." GAM es el acrónimo de Gerakan Aceh Merdeka, o el Movimiento Aceh Libre, una guerrilla independentista que opera en Aceh desde 1976. En el ultimo incidente el viernes por la tarde, policía armada hizo una redada en la oficina de una organización llamada PEMRAKA (Puesto Comando de Interés de Estudiantes y Acehneses) arrestando a tres estudiantes, los cuales eran miembros de la comisión directiva de la protesta. Muhammad Taufiq Abda, Iqbal Selian, y Bustami, quienes tienen unos 20 años, se cree que fueron mandados a una estación de policía en Banda Aceh el viernes por la noche. Unas veinte personas, se ha confirmado, han muerto en los últimos dos días mientras trataban de llegar a Banda Aceh para participar en la protesta. Algunas organizaciones locales estiman que más de cien personas murieron. Estas violaciones están ocurriendo aún cuando oficiales de alto rango indonés han castigado públicamente el ataque armado de parte de las fuerzas militares hace los protestantes y activistas, los cuales recibieron ordenes directas del presidente. Pero aun así, nada ha pasado en cuanto a arrestos de estos perpetradores. Las fuerzas de seguridad de Indonesia no están haciendo ningún esfuerzo para distinguir entre las acciones de los guerrilleros y aquellas de los estudiantes, civiles y varias organizaciones, las cuales protestan pacíficamente. Human Rights Watch hace un llamado a donantes de indonesia y otros gobiernos para que:
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