Los participantes en la 28ª Conferencia anual de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP28) deberían instar a los Emiratos Árabes Unidos, el anfitrión, a poner fin a su represión de la sociedad civil independiente y deberían comprometerse a eliminar gradualmente los combustibles fósiles, dijo hoy Human Rights Watch al publicar un documento de preguntas y respuestas sobre la reunión. La conferencia comenzará el 30 de noviembre de 2023 y se llevará a cabo en Dubai.
“Esta no es una conferencia sobre el clima para pusilánimes”, advirtió Richard Pearshouse, director de la división de medio ambiente de Human Rights Watch. “Los gobiernos de todo el mundo deben presentarse en los Emiratos Árabes Unidos preparados para transmitir un mensaje claro de que una acción climática ambiciosa requiere una participación significativa de voces independientes, incluidas aquellas que piden la eliminación gradual de los combustibles fósiles”. Las emisiones mundiales de gases de efecto invernadero procedentes de la quema de petróleo, carbón y gas siguen aumentando, acelerando el calentamiento global. Los planes de gobiernos, incluidos los de los Emiratos Árabes Unidos, para aumentar la producción de carbón, petróleo y gas son inconsistentes con sus compromisos en virtud del Acuerdo de París sobre cambio climático de limitar el calentamiento global a 1,5 grados centígrados por encima de los niveles preindustriales.
Grupos emiratíes independientes ya han expresado su profunda preocupación por la crisis de derechos humanos en los Emiratos Árabes Unidos, en particular los ataques del gobierno contra los defensores de los derechos humanos y los disidentes políticos. El defensor de derechos más conocido del país, miembro del comité asesor de Human Rights Watch para Oriente Medio y el Norte de África, Ahmed Mansoor, lleva encarcelado desde 2017 por cargos falsos.
Los Emiratos Árabes Unidos arrestan habitualmente a sus detractores y las autoridades han ignorado o negado las solicitudes de acceso al país de expertos de las Naciones Unidas, investigadores de derechos humanos, académicos y periodistas que han criticado los abusos de los Emiratos Árabes Unidos.
“El gobierno de los Emiratos Árabes Unidos debería liberar inmediata e incondicionalmente a los activistas y defensores de los derechos humanos detenidos arbitrariamente y comprometerse a defender los derechos humanos antes, durante y después de la conferencia”, dijo Pearshouse. “No vamos a lograr las políticas climáticas sólidas que el mundo necesita desesperadamente a menos que los gobiernos comiencen a escuchar a la sociedad civil, incluidos los activistas”.
